Netas, no rumores

LILYMETH MENA -.

Recuerdo bien las imágenes que se transmitían aquella noche por todas las cadenas televisivas del mundo. Las calles de Miami repletas de cubanos en el exilio salían a las calles danzando y cantando por la supuesta muerte de Fidel Castro.

Una noticia que no se había confirmado aun por el gobierno de la isla. Un rumor que empezó quien sabe donde y que terminó con Raúl Castro ante las cámaras, informándonos que Fidel estaba hospitalizado pero fuera de peligro. 

En seguida, me imagino, aquellos cubanitos felices por la muerte del líder comunista se devolvían a sus casas con toda la animosidad venida hasta los pies. 

Cesaron los bailes y callaron los cantos.

Esa misma noche yo cavilaba con la espalda pegada a la cama, sobre si tendría alguna validez salir a festejar la muerte de un “tirano”.

Hace unos minutos leo en páginas internacionales que se presume la muerte de Bin Laden. Otra noticia sin confirmar hasta el momento y que parará a muchos de punta. Sobre todo si llega a ser verdad.

Para mi la muerte de alguno de estos tétricos personajes no significa realmente un cambio o algo positivo. Es únicamente la muerte de un símbolo viviente, queda para precederles el pensamiento bien sembrado en la mente de sus fieles seguidores, en un régimen que gobierna a una cantidad nada despreciable de habitantes.

Queda sobre la pared una sombra bien delineada e imposible de borrar. Es pasar la antorcha a otra mano.

En México 75 años de imposición partidista nos tenían aplastados bajo el peso puesto sobre nuestras espaldas, creímos tener alguna esperanza con la luz que nos vendieron al permitir que otro partido subiera al poder. Pero todo era una maniobra. El totalitarismo sigue reinando y seguimos comiendo pan con lo mismo. No hay régimen que termine cuando los de abajo mantienen el mismo pensamiento de conservacionismo. 

La ruptura de un eslabón no significa el fin de la cadena que nos pende del cuello.

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9 Comentarios

  1. Anónimo2/5/11

    Me han surgido las mismas reflexiones al saber esta noticia, ojalá que este hecho, más allá de la realidad que pueda tener, no sea causa de dolor para más seres humanos inocentes. Por eso me es imposible alegrarme; los que celebran , allá ellos.
    Caroline

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  2. El pueblo americano festeja el hecho que en los medios les venden como el suceso más importante de los últimos años. Cuando quiero elaborar algún tipo de conjetura al respecto siento pidad de la gente que se deja llevar de las narices y recuerdo cuántas veces en mis tierras se procedió de la misma manera.. recuerdo la guerra de Malvinas y otros momentos en los que un notable minoría festejó un golpe militar.
    Personalmente creo que la noticia del día no es más que parte de la publicidad oficial de los amigos del norte, se corresponde con una necesidad propia de su estado.
    No tengo nada que celebrar.. Me quedo a la espectativa para ver qué sigue.. ¿se desatará la paranoia?

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  3. Anónimo2/5/11

    A los gringos no les creo ni j.

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  4. Ver para creer, seremos demasiado desconfiados ?? Quién sabe hay tantos intereses detrás de esto. La actitud de festejar como si hubiesen ganado el mundial es esperable. Nos meten el perro !

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  5. Al parecer, la muerte de Osama es un hecho aceptado por sus seguidores. No traerá menos violencia ni mayor paz.
    Hace un rato leo que la madre de un joven chileno que murió en el atentado a las torres gemelas se ha alegrado según declara.
    La entiendo y siento que por ella está bien.
    Nadie debiera alegrarse por la muerte de otros, los chilenos cargamos en la conciencia las fiestas y celebraciones mayoritarias para el once de septiembre del 73, algunos con el tiempo lo han lamentado, la mayoría prefiere mentirse y decir que se celebró solo en los sectores pudientes lo cual es falso. Al menos medio país celebró.
    Ahora lo recuerdo con cierto pesar mirando a los gringos destapando botellas y brindando. Obama asegura su re-elección y Osama pasa a la historia. Muerte o suicidio, vaya él a saber.

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  6. Anónimo3/5/11

    Personalmente, esta noticia no ha hecho más que producir en mí una gran inquietud y por otra parte, algo me dice que no es del todo cierto lo que nos cuentan. YO NO ME LO CREO, hay demasiados errores que no comprendo.
    No veo que la noticia sea para echar cohetes sino para echarse a temblar. En fin. El gobierno norteamericano, lejos de contribuir a arreglar las cosas se empeña en hacer lo contrario.

    Si alguien tiene razones de peso para que yo piense lo contrario que me lo explique.

    Un saludo amigos.

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  7. Breve y contundente, Lilymeth... totalmente de acuerdo.

    Un abrazo

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  8. Neta para los mexicanos y la posta para los porteños. Lo que pasa acá es que todo es una joda de mal gusto que nos tendrá en ascuas un buen tiempo. Lo mismo de siempre con estos yanquies y sus complices.

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  9. Fisurando las teorías conservadoras de la historia, querida Lilymeth. Esto de atribuirles excesivo protagonismo a entes individuales es propio de las ideologías conservadoras que pretenden facilitarse las cosas a sí mismos, a la par que manipulan al resto. Bin Laden fue, o es aun, nada más que un chivo expiatorio de las potencias occidentales, un gran símbolo justificador y legitimador del avasallamiento blanco. La historia real es increíblemente más matizada, colectivista y compleja.
    Solidísimo texto.

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