Los todólogos, el 25-S, y el Pueblo soberano

JESÚS CHAMALI -.

Hace unos años se impuso, primero en la radio y luego en las televisiones, la figura del tertuliano todólogo profesional. Era éste un curioso personaje que entendía de todo, o al menos simulaba hacerlo. ¿Que hay que hablar de economía? Ellos hablan como si fueran doctores en la materia. ¿Que de lo que se habla es de política exterior? Ningún problema, los mismos tertulianos pontifican sobre ella como si del mismo Ministro de Exteriores se tratara. ¿Que lo que se trata es de ciencia? ¡Bueno...entonces se dan ínfulas de premio Nobel...! Y de esa manera todos entienden de todo y tratan de dar sus opiniones como verdades absolutas.

Esta mañana, en una cadena de televisión de cobertura nacional, pude ver y oír a un grupo de esos todólogos, aprendices de todo y maestros de nada, despacharse a gusto sobre el movimiento 25-S como si ellos fueran a la vez los gestores del mismo movimiento y la viva oposición de éste. En concreto, una de las todólogas de cabecera del programa, mera periodista ocasional, bramaba contra el movimiento diciendo del mismo que eran unos involucionistas y preguntándose quiénes eran ellos, ya fueran 6.000 o 100.000 los que allí estuvieron, para buscar que se disolviera el Parlamento, dimitiera el Gobierno y se hiciera una nueva Constitución.

Nadie cayó en la cuenta de que "ellos" como despectivamente los llamaba, eran el Pueblo, aquél en el que, según la Constitución que esa señora tanto defiende, reside la soberanía.

El Pueblo, que harto de mentiras, medias verdades, asaltos a su dignidad y futuro, expolio y, comprobando que el Gobierno que ganó las pasadas elecciones lo hizo con un programa que ha venido incumpliendo sistemáticamente punto por punto, y los únicos que sí ha cumplido son los que han restringido más aún si cabe las ya exiguas libertades, se alza con una sola voz para decir :"¡Ya basta!" o "¡No nos representan!"

El Pueblo para el que esos mentirosos e inútiles que se autodenominan gobernantes dicen trabajar. ¿Y qué patrón no puede decirle a sus empleados que eso no es lo que querían de ellos cuando los contrataron? ¿Qué empresa no puede despedir al empleado inepto o infiel?

Pues bien, en España no se puede.

Porque amparándose en no sé que sagrados principios, no se puede molestar a los legisladores, aunque éstos sean unos corruptos, unos mentirosos y unos inútiles, y no se les puede rescindir el contrato anticipadamente.

Pero ellos sí que pueden hacerse un país a su gusto, cambiar las leyes, atacar y golpear a quien en principio debieran cuidar y proteger y crear las condiciones que les convengan en el futuro.

Y además lo hacen impunemente, escudándose un mayorías conseguidas con mentiras evidenciadas o en normas que vienen de un pasado donde nada era como lo es ahora.

Es como si pudieran reeditar el derecho de pernada de la edad media porque antes era legal...

Y mientras, los todólogos dedicándose a hablar de todo y de nada con verdadero conocimiento de causa, creando corrientes de opinión y vendiéndose al poder, como los antiguos bufones.

Un último apunte: en el 2.013 se conmemorarán los 500 años de la publicación de "El Príncipe".

¡Quién le iba a decir a Maquiavelo que su obra iba a estar plenamente en vigor cinco siglos más tarde...!

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7 Comentarios

  1. En Chile les llaman opinólogos (mal dicho, porque debieran llamarse simplemente opinantes). El único requisito es ser "cualquier idiota".

    Resultan muy funcionales, porque al no saber en profundidad de nada ni tener idea de las causas, vanalizan los movimientos sociales, despojándolos de toda su importancia histórica.

    Un abrazo amigo mío.

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  2. Han logrado matarnos la ilusión. Hasta que el último optimista no caiga, no van a ceder.
    No es nuevo...cambiar un poquito para que realmente nada cambie.
    Dignos nietos del caudillo, los gobernantes sin escrúpulos tienen caras y apellidos que nos remontan a un pasado que aún podemos recordar.
    A veces me siento una hormiguita a expensas del poder. Pero también hay una guerrera que combate. Me alivia saber que no estamos solos, amigo Jesús. Pese a ellos, o precisamente por ellos,no vamos a tirar la toalla.
    Un abrazo.

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  3. Fuerza España!! Qué se puede decir desde tan lejor. Leo las crónicas y me da cosquillitas en el corazón. Se parece a Argentina en 2001. Ojalá sobrevivan a este horrible momento.

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  4. Durante nuestra crisis y en este mismo momento de inestabilidad hubieron todólogos y opinólogos de lo más bizarros, debiera decir que los hubo siempre y asumir que nunca dejarán de surgir nuevos exponentes. Estos personajes nefastos que se ganan su denominación con todo el desprecio y desdés que se merecen, en absoluta contraposición con las mentes holísticas que abrazan al mundo con su pensamiento, pululan por todas partes y están al servicio de cualquiera para aumentar la sensación de confusión y malestar. Son odiosos y contaminan el pensamiento, dicen y se desdicen. ¿Cómo deshacerse de ellos? No sé, no lo veo posible. Uno puede aislarse momentaneamente de sus ecos, no más.

    Un pésimo momento, lo exponés demasiado bien. Se les acompaña a lo lejos..

    Abrazos.

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  5. Raúl de la Puente29/9/12

    Los legisladores han obtenido la peor de las notas, junto a los banqueros.

    Buen artículo señor Chamali

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  6. La democracia liberal tiene sus costos, como tener que soportar a estos pelagatos todólogos.

    Saludos

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  7. Luis Manteiga Pousa14/3/23

    Politólogos, tertulianos que saben de todo, es decir, todólogos...La verdad es que sobran la gran mayoría. En cambio hacen falta fontaneros, electricistas...Son mucho más necesarios socialmente. Pero, claro, cada uno se dedica a lo que quiere y/o puede. Me estoy liando, creo que me han contagiado, estoy hecho un todólogo, últimamente opino de cualquier tema indistontamente.

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