Poemas de Homero Carvalho Oliva (*) del libro Inventario Nocturno, Premio Nacional de Poesía 2012.

HOMERO CARVALHO OLIVA -.
Herencia

Para Brisa Estefanía, Luis Antonio y Carmen Lucía

No vayan a creer
en Adán y su manzana
en los héroes de la historia oficial
en la solemne Constitución
y sus cuentos de Leviatán
en los pronósticos del fin del mundo
ni en las lágrimas de los políticos
cuando hablan de la patria
la patria no es otra cosa
que alguien a quien amar
una ciudad elegida para vivirla
una canción que nos convoca
un paisaje imprescindible
y los abrazos de sus padres
y por cierto los nueve meses
que maduraron cual simiente nuestra
en el vientre acuático de su madre
y el amor que se estremecía
haciéndonos balbucear de alegría
cuando pateaban la luna
anunciando que pronto nacerían
eso hijos míos y que sepan
que cuando nacieron
descubrimos que nosotros
éramos sus herederos.



Poética esdrújula

Tímidos, jóvenes, románticos, vértigo, cómplices, sábanas, húmedas, íntimos, erótico, cópula, éxtasis, cónyuge, efímero, lágrimas (…) árboles, mandrágoras, nenúfares,  madréporas, tréboles, luciérnagas, búfalos, murciélagos, águilas, cóndores, pelícanos, hipopótamos, víboras (…) búsqueda, histórica, geógrafo, brújula, marítimo, mástiles, relámpagos, América, pirámides, utópico, hispánico, monárquico, indígena, síntesis, república (…) música, sílabas, fábula, metáfora, imágenes, semántica, metafísica, diálogos, poético, épico, lírico, artístico (…) homínidos, mítico, teólogos, diáspora, filósofos, místicos, máscaras, ídolos, pontífices, políticos, líderes, sicópatas, sátrapas, súbditos, autónomos, ejércitos, máquinas, cadáveres, metrópolis, necrópolis, anónimos, terrícolas, galáctico, paréntesis.

Hamlet

Vivir morir soñar acaso
Morir soñar acaso vivir
Soñar acaso vivir morir
Acaso vivir morir soñar

Vivir morir          acaso
Morir soñar           vivir
Soñar acaso        morir
Acaso vivir          soñar
Preguntas

¿Qué dicen los árboles
cuando el viento mueve sus hojas?

¿Quién se robó el mar
que suena en las caracolas?

¿Qué será del cielo
cuando desaparezcan las aves?

¿Serán los besos
el puente
entre dos silencios?

¿Será el silencio
la melancolía de las palabras?

¿Será cierto que hay palabras
que maduran y se pudren como las frutas?

¿Y si un día amanecemos
prendidos de un muestrario
como esos bichos clavados por un alfiler?

¿Y si Cervantes fue el sueño del Quijote?
Entonces qué


Rutina

En esta urbe de apariencias
y de seductoras banalidades
hay muchachas bonitas
que se han convertido
en sus propios anuncios comerciales
y existen omnipresentes noticieros
que compiten entre ellos
vendiendo a los muertos del día
olvidando que sobrevivir a la jornada
es la verdadera noticia.


Cartas I

De Adán para Eva

Mi incomparable Eva:
Que este poema reemplace a la hoja
que te arrebataron cuando perdimos el Paraíso.

De Eva para Adán

Inevitable Adán, razón de mis pecados:
Del Paraíso perdido
solo extraño la obscena sensación de lo prohibido.


Los pobres

Las casas de los pobres
no tienen puertas ni ventanas
porque su soledad no necesita de encierros.

Son tan oscuras sus noches
que los pobres sueñan
con las vísperas de la Creación.

Las ollas de los pobres
ya no sirven para cocinar
son campanas que anuncian
que están aquí y que no se irán
hasta que alguien los escuche.

Los pobres yacen con su insomnio
en duros colchones de paja
o el cansancio los acuesta
en las duras veredas de las calles.

Los domingos los pobres
que nunca sufren de estrés
ni visitan a los psicólogos
van a la misa y sus rezos
son un rumor de muchedumbre
suplicándole a Dios
algún milagro de vida
mientras los otros
estrenando ropa dominguera
van de uno en uno
para pedirle un viaje
al recién descubierto paraíso
y le dejan al aburrido párroco
una limosna que es igual
al salario de un mes de los pobres.

Los pobres son tan buenos
que cuando llega un pariente rico
matan a la única gallina ponedora
para agasajarlo con un plato criollo.

Los nombres de los pobres
son tan comunes que siempre los olvidamos.

Los pobres cargan a las ciudades
sobre sus espaldas y las ciudades
solo se acuerdan de ellos en el censo.
 
Los pobres no tienen dónde caerse muertos
y no les queda más remedio
que seguir viviendo su pobreza.

Los pobres nacen marcados
para que nadie olvide que son pobres
y cuando dejan de serlo
siempre hay algo que los delata:
su estridente música callejera
sus inoportunas y sonoras carcajadas
sus comidas que huelen a cebolla cruda
y el descaro con el que muestran
que dejaron de ser pobres
ofendiendo a los afortunados de cuna
de apellidos sobrevalorados
que no quisieran tenerlos en sus barrios
ni en sus exclusivos clubes sociales
porque creen que el cielo
y las buenas costumbres
son de su propiedad privada.


Palabras
Para Carmen Sandoval, por supuesto

A la palabra Lluvia hay que mirarla bañando los huertos
A la palabra Viento escucharla acariciados por su transparencia
A la palabra Rocío palparla como un colibrí roza la luna llena
A la palabra Manzana saborearla recordando algo prohibido
A la palabra Jazmín olerla como si fuera a estallar en los labios
Con la palabra Amada en cambio
debemos conjugar todos esos verbos.


El poeta
Para Augusto Monterroso
Cuando despertó, el poema todavía estaba allí.


Redire mortis

Cuando yo muera
no se apenen por mi ausencia
ni digan que me extrañan
no vaya a ser que resucite.

Escritos en el muro

La poesía es el psicoanálisis
de los pequeñoburgueses
La copla de los pobres
El bolero de los románticos
El rock de los jóvenes
El jazz de los negros
y el grafiti de los poetas sin editor.



(*) Homero Carvalho Oliva, Beni, Bolivia, 1957, escritor y poeta, ha obtenido varios premios de cuento a nivel nacional e internacional, dos veces el Premio Nacional de Novela con Memoria de los espejos y La maquinaria de los secretos. Su obra literaria ha sido publicada en otros países y ha sido traducida a varios idiomas y figura en más de treinta antologías nacionales e internacionales de cuento como Antología del cuento boliviano contemporáneo, The fatman from La Paz e internacionales, como El nuevo cuento latinoamericano de Julio Ortega, México; Profundidad de la memoria de Monte Ávila, Venezuela; Antología del microrelato, España y Se habla español, México; en poesía está incluido en Nueva Poesía Hispanoamericana, España; Memoria del XX Festival Internacional de Poesía de Medellín, Colombia y en la del Festival de Poesía de Lima, Perú; así como en la antología Poetas del Oriente boliviano de Pedro Shimose. Entre sus poemarios se destacan Los Reinos Dorados y El cazador de sueños y Quipus. El año 2012 obtuvo el Premio Nacional de Poesía con Inventario Nocturno y el 2013 publicó la Antología de Poesía Amazónica de Bolivia y la Antología Bolivia. Tu voz habla en el viento, que reúne a 55 autores, entre ellos a 3 Premios Nobel de Literatura hablando de Bolivia.


Fotografías de Sabrina Illatarco

Publicar un comentario

4 Comentarios

  1. Es un gran honor para nosotros publicar al escritor y poeta boliviano Homero Carvalho Oliva, creador de talla mundial, hombre erudito y generoso, cuya acendrada lucidez contribuye significativamente a la hermandad de nuestros pueblos, así como a ampliar los límites de las posibilidades literarias.

    Le doy un fuerte abrazo de bienvenida.

    ResponderEliminar
  2. Qué genial incorporación a esta página que es de lectura obligadamente placentera para mí. Felicitaciones!!!

    ResponderEliminar
  3. Bienvenido a Plumas, leerte es un lujo y un placer :)

    ResponderEliminar
  4. Homero... mil gracias por tu lucidez literaria. Este texto va a ser un recurso muy bueno para utilizarlo con mis alumnos de sexto de primaria. Tu manejo de la lengua es mas útil que mil teorias. Un honor leer tus textos y poder compartirlos.

    ResponderEliminar