Miguel Sánchez-Ostiz
¿Y ese nada en qué va a consistir, en qué consiste ya? Por el momento solo son imaginaciones basadas en noticias de guerra: carencia y encarecimiento de combustibles, la industria alimentaria en la cuerda floja, aumento del militarismo llevado al extremo de virtud religiosa, como el patriotismo a él adherido cual lapa, encarecimiento de bienes y servicios, más burocracia, expolio bancario, las carencias o necesidades sociales hechas negocio de unos pocos, ferocidad social, mayor control policial y de medios de comunicación que puedan poner en tela de juicio el nuevo orden, maniqueísmo de buenos y malos... parte de esto, tan execrable, ya venía de atrás, lo quisiéramos ver o no, lo padecieras o miraras para otra parte. ¿Y en lo personal? A mí al menos me han entrado ganas de retirarme en mi blocao, atender a los míos en la medida que pueda y hacer como Cándido, filosofar y cuidar de mi jardín, aunque en la práctica también eso cueste y plantar un arbusto de flor no tenga el mismo sentido que tenía hace un año, cuando hicimos ejercicios de retiro pandémico y nos vimos las caras o nos las dejamos de ver para siempre: ejercicios de limpieza. Ahora vienen solos. Ausente, aunque estés presente.
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Publicado originalmente en el blog del autor, Vivir de buena gana (16/3/2022)
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