De la necesidad de una nueva política humanista de salud pública, tiene que indicarnos un filósofo con más de cien años, Edgar Morin, del porque hoy “No sabemos lo que está pasando y es precisamente lo que nos está pasando”; otro filosofo que treinta años atrás me influenció fue Hans-Georg Gadamer, me parece aun verlos caminar, guiando de la mano a su hija, por las calle del puerto de Civitanova Marche. Aquel día sostuvo un estupendo encuentro titulado Fe y verdad con otro filósofo, Emanuele Severino.
Hoy Edgar Morin cita al brillante Michel Serres: “Habiendo perseguido nuestros sueños de dominación, ahora la cuestión es dominar la dominación”. Quien nos domina es la estupidez. Me parece leer en esto el Bacon que nos advirtió sobre nuestras acciones: “La naturaleza se manda sirviéndola”.
No estamos viendo un enfrentamiento entre Aristocracia y Kakistocracia. La segunda está al poder desde hace mucho tiempo y una plebe siempre más distraída por la normalidad no se reconoce en nada y en nadie. En un nihilismo abstracto. Hablando de derechos que pisotean, de descolonización, de crecimiento económico. Un habla exhausta de significaciones y que no infiere en el no saber que son el mérito de la virtud y que es el error.
El caos ordena en un cinismo esquizofrénico que me invita al silencio de ayer, en la tarde, mientras oigo todo lo inefable.
Maurizio Bagatin, 27 de octubre 2022
Imagen: Jean-Baptiste Siméon Chardin, Still Life
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