¿Por qué nos enamoramos de estas imágenes, donde el tiempo está estancado, donde la presencia es ausente, donde el aire está lleno de la nada? Cuadros de Adrew Wyeth, de Edward Hopper, de George Tooker y de Andrea Kowch, la prosa de Samuel Beckett, de Vitaliano Trevisan y de Thomas Bernhard.
Imágenes y palabras que nos transportan en espacios irreconocibles, violentados y transfigurados, en el hoy, en el fuego, en el apocalipsis. Me envía un amigo el “testamento espiritual” del ultimo poeta civil que tuvo Italia, Pier Paolo Pasolini, es la confesión del traspaso que el definió mutación antropológica, a la cual le añadiría o ya la transformaría en mutación genética, acompañando esta mi teoría con los análisis apocalípticos que hizo la lucida mente de Ivan Illich.
Unos cuadros y una prosa enfrentándose a la nada, al absurdo y al grotesco. Don del arte. Secuela poética del big bang…del amor, del poder y de la guerra.
Imágenes y palabras en búsqueda de mas preguntas.
Maurizio Bagatin, julio 2024
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