Optimist Hotel (Diario volátil, 17)

MIGUEL SÁNCHEZ-OSTIZ -.

1.- Optimist Hotel, plaza del Hipódromo (Sultanahmet Meydani) de Estambul, frente a donde hace poco hubo un atentado sangriento. No todos los días hay habitaciones, no por fuerza. 

2.- «Mejor nada que cualquier cosa». Quedar, queda imponente, gran estilo, pero no pretendas ir muy lejos con ese viento.

3.- Si no quieres recibir el barato de la timba de los tramposos no te acerques al tapete.

4.- Curioso ese funambulista que ejecuta su número de altura sin red, sin maroma y en la oscuridad... y con el público pidiendo otra, otra. 

5.- El adulador de hoy es el navajero de mañana. En el teatro de la plaza pública, los aplausos se hacen abucheos con una facilidad pasmosa.

6.- A cierta edad, no te hagas ilusiones, cuando llaman a la puerta es raro que no sea para chulearte.

7.- Los suicidios «de la crisis» fueron primera plana, ahora es trabajo de forenses: de los encendidos editoriales de prensa a las mesas de disección del Anatómico Forense, y de ahí por la puerta trasera, al silencio.

8.- «Cuando ya nada se espera personalmente exaltante, mas se palpita y se sigue más acá de la conciencia, fieramente existiendo...», no me acuerdo cómo sigue el poema de Gabriel Celaya. Y si no me acuerdo es porque no me conviene.

9.- Sancho a Don Quijote cuando el telón va a caer: echarse a morir, eso si que es locura.

9.- Henry Miller, en Primavera negra, sigue brillando y espoleando vida y escritura cuarenta años después de su primera lectura, mientras afuera jarrea y el vendaval azota puertas y ventanas... y sin láudano y con el primer vencejo de la primavera en el aire. La tumba de De Quincey hecha diana de jeringas de yonquis en el cementerio de St. Cuthbert, bajo el castillo de Edimburgo.