¿Cómo hacer comunidad? es una de las eternas preguntas. ¿Quiénes somos, de donde venimos, adónde vamos? Reunirnos en un jardín y explorar posibilidades, las oportunidades o la pura realidad. Solo una poesía de un Nobel me conduce a la antítesis de la cruel realidad: “Cada uno está solo sobre el corazón de la tierra/traspasado por un rayo de sol/y de pronto anochece”. La incertidumbre y la futilidad de la existencia. Palabras de poetas que cruzamos todos los días en nuestros andares. Simplemente.
Solos en las vidas de nuestras solas poesías, andar diciendo y haciendo lo poco que logramos ir amasando en nuestras mentes y con nuestras manos; todo fluye gracias a los errores y a las imperfecciones. Son los verdaderos protagonistas. La auténtica poesía es hacer es el amor una vez, que es hacer el amor para siempre.
“Luna llena y ametralladoras que van sembrando lechugas y tomates en un jardín. El Che Guevara se ilumina, ve el camino que él no emprendió. Compro caramelos de dos pesos a la caseritas de la esquina: wira wira, eucalipto y menta. Caminar es metabolizar aciertos y fracasos. Sentarse es reconocer los traspiés de unas vidas”.
¿Cuántas veces proyectamos lo imposible? Y al fin reconocemos que solamente las preguntas con las cuales nos salimos valen todas las ideas de nuestros proyectos. La edad coincide con los sueños, con la utopía, siempre con la experiencia. Construimos un rompecabezas bellísimo, que es el reflejo de nuestras imperfecciones, el más sincero reconocimiento a nuestros esfuerzos, a nuestros sueños, a nuestras ilusiones. La edad no miente, nunca.
Borrachera in vino veritas es borrachera “a calzón quitado”; uno va contando los pecados que nunca confesó a nadie, otro va oyendo las miserias y las noblezas que nunca quiso oír.
“Hay quien en la puerta de su casa regala limones, quien prohíbe el paso a los vecinos, extraña fauna de seres que comparten solamente la mera presencia. Hablando de un deporte que despierta nuevas emociones, el padel (me contaron que era el deporte de quien fracasó en todos los demas deporte). El aburguesamiento no tiene límites: aquí como en el país donde nací, anda mal el futbol y nos regeneramos con deportes que demuestran la transformación de una sociedad, el tenis, por ejemplo”
Maurizio Bagatin, 23 de junio 2024
Imagen: Saul Steinberg
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